El motivo por el que uno elige unos cerramientos de aluminio en Gijón es porque su resistencia a la oxidación frente al ambiente es mucho mayor que el de metales como el hierro y el acero. Pero ¿sabes en qué circunstancias puede oxidarse el aluminio y cómo prevenirlo?

En determinados casos, los cerramientos de aluminio en Gijón o en cualquier otro ambiente pueden presentar corrosión, por lo que se deberá prestar especial atención a la hora del montaje para evitar problemas de funcionamiento a corto y medio plazo.

El aluminio como material en realidad se oxida mucho antes en contacto con el ambiente que el acero o el hierro, pero al contrario que en estos otros casos, el aluminio forma una capa superficial de óxido poco porosa y no soluble que lo protege frente al aire y frena la reacción, por lo que se le considera prácticamente inerte.

No obstante, el aluminio elimina su capa superficial de corrosión y se oxida en contacto con otros metales de diferente potencial eléctrico, lo que puede ocurrir por ejemplo en la realización de muros cortina en los que los montantes sean de aluminio y los anclajes y las mechas de acero, en un proceso que se conoce como corrosión por pares galvánicos. Esto puede evitarse incorporando capas de separación inertes, es decir, plásticos.

Los tratamientos que un perfil de aluminio puede incorporar para evitar la corrosión son el lacado y el anodizado. El lacado es una pintura que se aplica a la superficie del perfil y el anodizado un tratamiento que oxida precisamente la capa más superficial del aluminio para hacerlo inerte electrolíticamente.

De todo esto y de mucho más entendemos en Carpintería de Aluminio y Cristalería Joisa para satisfacer tus necesidades en cuanto a la correcta instalación de estos perfiles, así que no dudes en consultarnos.