Una de las especialidades de nuestra empresa de ventanas de aluminio en Gijón es la rotura de puente térmico, conocida en algunas ocasiones como RPT por sus siglas, una de las características principales que han de tener las ventanas para obtener el mejor aislamiento posible.

Para entender el funcionamiento de este sistema basta con saber que el aluminio que tantas ventajas tiene en los productos de la Carpintería de Aluminio y Cristalería Joisa es, al fin y al cabo, un material conductor. Eso implica que por esta propiedad del aluminio, se transmite el calor del interior al exterior, dejando escapar una parte del mismo, lo que provoca las típicas gotas de agua condensada en los marcos de la ventana, síntoma inequívoco de que el aislamiento no es todo lo eficaz que debería ser.

Para evitar ese proceso, en las ventanas de aluminio en Gijón se utiliza lo que se conoce como rotura de puente térmico, un sistema que busca evitar que la cara interior y exterior tengan contacto entre sí, intercalando un mal conductor entre ellos, con el objetivo de evitar la pérdida de calor. Existen diferentes materiales que se pueden utilizar para lograr la rotura de puente térmico, aunque la más habitual en el sector son las varillas de poliamida reforzadas con fibra de vidrio.

Como ya hemos anticipado, el ahorro de energía es una de las principales ventajas de este sistema instalado en las ventanas de aluminio, pero además, se reducen las emisiones de CO2 y cumple con las exigencias del protocolo de Kyoto. Y un apunte: más allá del factor funcional, también aportan un plus estético, ya que permite que el acabado interior y exterior de las ventanas sea diferente.